sábado, 4 de febrero de 2012

Norma Andrade tenía asignados agentes de PGR; “¿cómo dieron con ella para atacarla?”, pregunta la hija

La hija de la activista Norma Andrade, Malú García Andrade, dijo en entrevista con SinEmbargo que el ataque a su madre es muy grave pues, en teoría, “nadie sabía el domicilio en el que ella vivía” desde diciembre 15 pasado.
Hasta su dirección llegaron uno o varios atacantes. Uno de ellos la hirió con una navaja. No tenía protección.
Malú García Andrade dijo que la Procuraduría General de la República le había asignado a dos agentes pero la protección era a medias.
“Eran dos agentes. Andaban a pie, ni siquiera con auto. Muchas veces se distraían, salían y dejaban a mi madre descubierta”, dijo la hija de la activista.
Dijo que ahora solicitarán otra vez protección directamente a la Secretaría de Gobernación.
Norma Andrade está ya estable, dijo su hija.
La activista fue atacada nuevamente esta mañana en el Distrito Federal, donde reside desde el pasado 15 de diciembre. La confirmación de esta noticia la dio su propia hija, Malú García Andrade, en el blog oficial de la asociación “Nuestras Hijas de Regreso a Casa AC”, que tiene su sede en Ciudad Juárez, Chihuahua.
La activista estaba en custodia de la Procuraduría General de la República, a petición de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Una fuente dijo que quienes la auxiliaron fueron cuerpos de Seguridad Pública de la Ciudad de México. Los agentes supuestamente asignados para su custodia no aparecieron por lo menos en las primeras horas después del ataque.
Antes, el dramaturgo, guionista y activista defensor de derechos humanos, Humberto Robles, difundió vía Twitter informes sobre el atentado a Norma Andrade, quien es la fundadora de “Nuestras Hijas de Regreso a Casa”.
Robles también tuiteó que estaba hospitalizada, aunque por razones de seguridad no reveló la ubicación del sanatorio donde está siendo atendida.
En la cuenta @Feminicidios, expuso que el atentado lo realizó un sujeto que se presentó en el actual domicilio de la activista en el Distrito Federal y la atacó con un arma punzo cortante. Humberto Robles informó que el ataque se lo había confirmado la hermana de la activista, vía un mensaje de texto.
EL ATAQUE DEL 12 DE DICIEMBRE DE 2011
El 12 de diciembre de 2011, en un supuesto intento de robo, Norma Andrade fue baleada en calles de Ciudad Juárez, y fue internada en la Clínica 66 del IMSS de es ciudad.
Las autoridades municipales indicaron que la activista social recibió por lo menos dos disparos, de cinco que se realizaron en su contra, cuando transitaba sobre las calles Toronja Roja y Pacheco de la colonia Infonavit Solidaridad de Juárez.
Estos hechos se presentaron horas después de que fuera detenido Eduardo Chávez Marín, vinculado con el homicidio de Esmeralda Herrera Monreal, quien fue una de las ocho mujeres localizadas en el Campo Algodonero de esta frontera.
El jueves 15 de diciembre de 2011, y bajo total hermetismo, Norma Andrade finalmente abandonó Ciudad Juárez rumbo al Distrito Federal, donde viviría, presuntamente, protegida por la Policía Federal.
Andrade tiene 10 años en una infructuosa lucha contra los feminicidios en su ciudad natal, entre los que se cuenta el de su hija Lilia Gracía, de 17 años, ocurrido en diciembre de 2001.
CIUDAD JUÁREZ Y LOS FEMINICIDIOS
Ciudad Juárez ostenta todos los récords en materia de asesinatos, asegura la organización que dirige Norma Andrade. Durante el año pasado se registraron 306 homicidios de mujeres, uno de los problemas más serios del estado de Chihuahua.
El recuento está basado en información proporcionada por la Fiscalía General del estado, con 59 casos de desaparecidas, 39 de ellas menores.
“Ciudad Juárez sigue reflejando una grave problemática de violación a los derechos humanos de las mujeres”, aseguraron desde la ONG Justicia para nuestras hijas.
Pero si a la cifra de la violenta urbe mexicana se le suman los casos ocurridos en el resto del estado, el número aumenta, “las 107 mujeres que desaparecieron en el estado de Chihuahua durante 2010 continúan sin ser localizadas, 71 de ellas (el 66%) son menores de edad”, detalló la organización.