Intereses económicos aprovecharon para desprestigiar la ciudad: Serrano
La mayor parte de las investigaciones por homicidios contra mujeres se han resuelto y se encontró al culpable, asegura el presidencia municipal de Ciudad Juárez. En la imagen, protesta en la ciudad de México para exigir freno a los crímenes contra mujeres en el paísFoto Jesús Villaseca
Ciro Pérez Silva
El fenómeno de los feminicidios de que se ha acusado a Ciudad Juárez
es una leyenda negra que aprovecharon empresarios y promotores extranjeros para echar tierra a este municipio, con el propósito de evitar que las fábricas se instalaran en una urbe que competía favorablemente con países enteros, afirmó Enrique Serrano Escobar, presidente municipal de esta ciudad fronteriza de Chihuahua.
A la fecha, dijo,
la mayor parte de las investigaciones han sido resueltas, están concluidas y se encontró al culpable. Quedan muchos casos pendientes, pero se ha reducido el grupo que demanda justicia, con todo derecho.
Agregó que en los momentos más difíciles, cuando había mayor número de homicidios de mujeres,
comparábamos con otras ciudades de la República y del extranjero y teníamos menos asesinatos, todos lamentables, pero menos. Hubo intereses económicos que se aprovecharon de esta mala fama para echar tierra a Ciudad Juárez, que desde 1970 compite con otras urbes y países en materia de localización industrial, lo que significa millones de dólares. Cuando dio un resbalón, esos intereses se encargaron de desprestigiarnos en los medios, explicó.
Al referirse a la llegada a esta ciudad de ciudadanos expulsados por Estados Unidos, dijo que aunque se ha pretendido vincularlos con el aumento de la delincuencia en la frontera, “puedo dar testimonio de que la mayoría de los mexicanos repatriados no delinquen. Los criminales son los que viven dentro del país y están en los cárteles; los migrantes no nos dan problemas”.
Serrano Escobar recordó que hace poco Ciudad Juárez registraba 350 homicidios al mes,
ahorita estamos en 30, muy lamentables, pero la curva estadística está abajo, y de cada cinco autos que se robaban en todo el país, cuatro ocurrían en esta urbe; ahorita ya no hay tanto hurto de carros, dijo.