AGNESE MARRA
Con motivo del Día Mundial de la No Violencia contra las Mujeres, llega a Madrid la obra de teatro Mujeres de Arena. Un testimonio del feminicido de Ciudad Juárez que se ha convertido en un himno del dolor de las víctimas y familiares. Esta función ha sido representada en más de diez países y por 40 grupos de teatros diferentes. Por fin llega a la capital.
NUEVATRIBUNA.ES - 23.11.2009
El periodista Ryszard Kapuscinski decía que el silencio en muchas ocasiones era “señal de una desgracia y a menudo de un crimen, un instrumento político tan eficaz como esgrimir las armas y por ello, tiranos e invasores necesitan del silencio para que su actuación pase inadvertida”. El feminicidio de Ciudad Juárez es uno de los ejemplos que justifican esta frase.
Quince años de silencio e impunidad que se han llevado por delante la vida de 576 mujeres (hasta el mes de agosto de 2009) y más de 600 desaparecidas. El dramaturgo Humberto Robles es una de las personas que ha querido poner fin a ese ‘silencio’. Su obra Mujeres de Arena se ha convertido en un himno que recuerda las vidas que hay detrás de las cifras y la estadística. A través de diversos textos, el dramaturgo coloca en escena los testimonios de los familiares (una madre y una hija) de dos muchachas muertas y en el diario personal de otra asesinada.
La obra llega a Madrid después de haber sido representada en más de diez países y por más de cuarenta grupos de teatro. La primera representación tuvo lugar el 25 de noviembre de 2002 (Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres) en la plaza del Zócalo de la capital mexicana. El éxito fue rotundo, y su dramaturgo, artista y activista social, decidió no cobrar derechos de autor y donar todas las recaudaciones a la ONG Nuestras Hijas de Regreso a Casa, organismo formado por los familiares y amigos de las víctimas de Juárez.
Meses después, Robles decidió colgar el guión en Internet y hacerlo de acceso libre para aquellas personas que quisieran representarlo por el mundo y de este modo, conseguir mantener la memoria viva ante uno de los crímenes más brutales de finales del siglo XX. “Este teatro documental retoma el quehacer de varios dramaturgos como Brecht, que pensaban que el teatro debía cumplir una función social, de denuncia, comprometido, no sólo de divertir o entretener. En momentos tan graves como los que atraviesa México y el mundo en general, los artistas deberían comprometerse más con las causas y los hechos que nos aquejan”, señaló en una entrevista Humberto Robles.
Las críticas recibidas avalan la función social de la obra. “El conjunto de testimonios son desgarradores y a veces insoportables, y al mismo tiempo son una oportunidad para reflexionar sobre la inmensa descomposición de un esquema económico y político que ha llevado a la ruina al país”, destacaba un crítico argentino.
“Es una obra que habla principalmente de las muertas de Juárez, pero no sólo de eso, sino de la violencia que ha existido a nivel histórico en contra de la mujer. Con esto no quiero decir que sea una obra feminista, para nada. Lo que buscamos es proteger de alguna manera, podríamos decirlo así, el nido de la humanidad, es decir, la mujer, ya que ella tiene la posibilidad de procrear”, señalaba Cecilia Gutiérrez, una de las productoras del montaje.
El guión está basado en los textos de diversos autores. Antonio Cerezo Contreras, ex guerrillero preso en México durante siete años; Denisse Dresser, politóloga y periodista especializada en la violencia contra la mujer; Malú García Andrade, familiar de una víctima desaparecida; María Job, socióloga y escritora mexicana; Marisela Ortiz, profesora de literatura hispanoamericana; y Juan Ríos Cantú, actor mexicano.
El miércoles 25 de noviembre como homenaje del Día de la No Violencia Contra las Mujeres, la obra se podrá ver en Madrid, en el restaurante mexicano Las Mañanitas, a partir de las 19.00 horas. En esta ocasión el elenco estará formado por Úrsula Murayama, Hilda González, Yuriria Del Valle acompañadas por Luisa Martín y Rafael Rojas como invitados especiales.
Mujeres de Arena es el recuerdo y la denuncia de las cientos de mujeres asesinadas en Ciudad Juárez. También es la representación del dolor inmenso de los familiares impotentes ante la falta de ayuda de las autoridades mexicanas que en muchas ocasiones se niegan a buscar el paradero de las desaparecidas. Y por último, y por petición especial del dramaturgo, esta obra está dedicada a la memoria de Pável González, joven de 21 años, estudiante y luchador social asesinado en la Ciudad de México, en abril de 2004
El periodista Ryszard Kapuscinski decía que el silencio en muchas ocasiones era “señal de una desgracia y a menudo de un crimen, un instrumento político tan eficaz como esgrimir las armas y por ello, tiranos e invasores necesitan del silencio para que su actuación pase inadvertida”. El feminicidio de Ciudad Juárez es uno de los ejemplos que justifican esta frase.
Quince años de silencio e impunidad que se han llevado por delante la vida de 576 mujeres (hasta el mes de agosto de 2009) y más de 600 desaparecidas. El dramaturgo Humberto Robles es una de las personas que ha querido poner fin a ese ‘silencio’. Su obra Mujeres de Arena se ha convertido en un himno que recuerda las vidas que hay detrás de las cifras y la estadística. A través de diversos textos, el dramaturgo coloca en escena los testimonios de los familiares (una madre y una hija) de dos muchachas muertas y en el diario personal de otra asesinada.
La obra llega a Madrid después de haber sido representada en más de diez países y por más de cuarenta grupos de teatro. La primera representación tuvo lugar el 25 de noviembre de 2002 (Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres) en la plaza del Zócalo de la capital mexicana. El éxito fue rotundo, y su dramaturgo, artista y activista social, decidió no cobrar derechos de autor y donar todas las recaudaciones a la ONG Nuestras Hijas de Regreso a Casa, organismo formado por los familiares y amigos de las víctimas de Juárez.
Meses después, Robles decidió colgar el guión en Internet y hacerlo de acceso libre para aquellas personas que quisieran representarlo por el mundo y de este modo, conseguir mantener la memoria viva ante uno de los crímenes más brutales de finales del siglo XX. “Este teatro documental retoma el quehacer de varios dramaturgos como Brecht, que pensaban que el teatro debía cumplir una función social, de denuncia, comprometido, no sólo de divertir o entretener. En momentos tan graves como los que atraviesa México y el mundo en general, los artistas deberían comprometerse más con las causas y los hechos que nos aquejan”, señaló en una entrevista Humberto Robles.
Las críticas recibidas avalan la función social de la obra. “El conjunto de testimonios son desgarradores y a veces insoportables, y al mismo tiempo son una oportunidad para reflexionar sobre la inmensa descomposición de un esquema económico y político que ha llevado a la ruina al país”, destacaba un crítico argentino.
“Es una obra que habla principalmente de las muertas de Juárez, pero no sólo de eso, sino de la violencia que ha existido a nivel histórico en contra de la mujer. Con esto no quiero decir que sea una obra feminista, para nada. Lo que buscamos es proteger de alguna manera, podríamos decirlo así, el nido de la humanidad, es decir, la mujer, ya que ella tiene la posibilidad de procrear”, señalaba Cecilia Gutiérrez, una de las productoras del montaje.
El guión está basado en los textos de diversos autores. Antonio Cerezo Contreras, ex guerrillero preso en México durante siete años; Denisse Dresser, politóloga y periodista especializada en la violencia contra la mujer; Malú García Andrade, familiar de una víctima desaparecida; María Job, socióloga y escritora mexicana; Marisela Ortiz, profesora de literatura hispanoamericana; y Juan Ríos Cantú, actor mexicano.
El miércoles 25 de noviembre como homenaje del Día de la No Violencia Contra las Mujeres, la obra se podrá ver en Madrid, en el restaurante mexicano Las Mañanitas, a partir de las 19.00 horas. En esta ocasión el elenco estará formado por Úrsula Murayama, Hilda González, Yuriria Del Valle acompañadas por Luisa Martín y Rafael Rojas como invitados especiales.
Mujeres de Arena es el recuerdo y la denuncia de las cientos de mujeres asesinadas en Ciudad Juárez. También es la representación del dolor inmenso de los familiares impotentes ante la falta de ayuda de las autoridades mexicanas que en muchas ocasiones se niegan a buscar el paradero de las desaparecidas. Y por último, y por petición especial del dramaturgo, esta obra está dedicada a la memoria de Pável González, joven de 21 años, estudiante y luchador social asesinado en la Ciudad de México, en abril de 2004