Al debatir ante el pleno del Senado la propuesta presidencial de ratificar a Arturo Chávez Chávez como titular de la PGR, el PAN pidió no “anquilosar” ese nombramiento, el PRI dijo que antes es necesario garantizar su probidad, mientras que el PRD pidió a los senadores no “equivocarse” en la decisión, porque pesará en la historia del país.
Desde la tribuna del Senado, el senador Jesús Murillo Karam (PAN), consideró necesario que Chávez cumplan con el perfil de una persona “seria, responsable, profesional y capaz”, frente a las acusaciones en su contra por presuntas violaciones a los derechos humanos y ante la situación de inseguridad del país.
El coordinador del PT, Ricardo Monreal, se pronunció por analizar las causas de remoción del exprocurador, Eduardo Medina Mora, antes que ratificar a Chávez en la PGR.
Monreal aseveró que tras dicha remoción, se han suscitado diversas teorías, como que Medina Mora fue “desleal” al presidente Felipe Calderón al no actuar en contra de los gobernadores del PRI en época electoral o que incluso “está en peligro”.
“El señor Medina Mora, independientemente de sus últimos gestos de autonomía, es un hombre que está en peligro y el Estado mexicano tiene la obligación de protegerlo”, afirmó.
El vicecoordinador del PRD, Silvano Aureoles, aseveró que en caso de ser ratificado como nuevo procurador, sobre los senadores pesaría una responsabilidad con la historia.
“Espero que no nos equivoquemos, que no tomemos una decisión a la ligera y que no carguemos con el costo de la historia por ratificar a un funcionario que afuera, de entrada, aun apenas conocido su nombre, ha generado rechazo casi unánime de las organizaciones de derechos humanos”, destacó.
El senador Alejandro Zapata Perogordo (PAN) pidió a los legisladores no “anquilosar” el proceso, so pretexto de las acusaciones que pesan sobre Chávez. El panista pidió derecho de audiencia a Chávez en el Senado y no descalificarlo a priori.
“Si queremos que México prospere, si queremos funcionarios que de verdad cumplan con su responsabilidad, si necesitamos personas probas, tenemos que cuando menos respetarlas y escucharlas”, afirmó.
En ese marco, Arturo Chávez se reunirá esta semana con la bancada del PRI en el Senado, en busca de su apoyo para ser ratificado. La semana pasada se reunió con el presidente de ese órgano legislativo, Carlos Navarrete (PRD), y previamente con la bancada del PAN.
Asimismo, Chávez comparecerá el próximo 21 de septiembre en el Senado para responder a las críticas de organizaciones civiles, quienes consideran que Chávez incurrió en acciones violatorias de derechos humanos cuado fungió como procurador de Chihuahua, e incluso dejó inconclusas las investigaciones sobre los feminicios en Ciudad Juárez, Chihuahua.
En ese sentido, familiares de las mujeres asesinadas en aquel estado y organizaciones en pro de los derechos humanos protestaron en el Senado en contra de la ratificación de Chávez Chávez, y solicitaron a los legisladores no aprobar ese nombramiento que propuso el presidente Calderón.
Desde la tribuna del Senado, el senador Jesús Murillo Karam (PAN), consideró necesario que Chávez cumplan con el perfil de una persona “seria, responsable, profesional y capaz”, frente a las acusaciones en su contra por presuntas violaciones a los derechos humanos y ante la situación de inseguridad del país.
El coordinador del PT, Ricardo Monreal, se pronunció por analizar las causas de remoción del exprocurador, Eduardo Medina Mora, antes que ratificar a Chávez en la PGR.
Monreal aseveró que tras dicha remoción, se han suscitado diversas teorías, como que Medina Mora fue “desleal” al presidente Felipe Calderón al no actuar en contra de los gobernadores del PRI en época electoral o que incluso “está en peligro”.
“El señor Medina Mora, independientemente de sus últimos gestos de autonomía, es un hombre que está en peligro y el Estado mexicano tiene la obligación de protegerlo”, afirmó.
El vicecoordinador del PRD, Silvano Aureoles, aseveró que en caso de ser ratificado como nuevo procurador, sobre los senadores pesaría una responsabilidad con la historia.
“Espero que no nos equivoquemos, que no tomemos una decisión a la ligera y que no carguemos con el costo de la historia por ratificar a un funcionario que afuera, de entrada, aun apenas conocido su nombre, ha generado rechazo casi unánime de las organizaciones de derechos humanos”, destacó.
El senador Alejandro Zapata Perogordo (PAN) pidió a los legisladores no “anquilosar” el proceso, so pretexto de las acusaciones que pesan sobre Chávez. El panista pidió derecho de audiencia a Chávez en el Senado y no descalificarlo a priori.
“Si queremos que México prospere, si queremos funcionarios que de verdad cumplan con su responsabilidad, si necesitamos personas probas, tenemos que cuando menos respetarlas y escucharlas”, afirmó.
En ese marco, Arturo Chávez se reunirá esta semana con la bancada del PRI en el Senado, en busca de su apoyo para ser ratificado. La semana pasada se reunió con el presidente de ese órgano legislativo, Carlos Navarrete (PRD), y previamente con la bancada del PAN.
Asimismo, Chávez comparecerá el próximo 21 de septiembre en el Senado para responder a las críticas de organizaciones civiles, quienes consideran que Chávez incurrió en acciones violatorias de derechos humanos cuado fungió como procurador de Chihuahua, e incluso dejó inconclusas las investigaciones sobre los feminicios en Ciudad Juárez, Chihuahua.
En ese sentido, familiares de las mujeres asesinadas en aquel estado y organizaciones en pro de los derechos humanos protestaron en el Senado en contra de la ratificación de Chávez Chávez, y solicitaron a los legisladores no aprobar ese nombramiento que propuso el presidente Calderón.