Manifestamos nuestra indignación por el artero ataque contra Norma Andrade, activa defensora de los derechos humanos, quien no ha dejado de pedir justicia para su hija asesinada en 2001. Exigimos a las instancias gubernamentales encargadas de prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres, de hacer justicia y garantizar el estado de derecho, que se esclarezca este ataque y se garantice la protección a Norma Andrade y Nuestras Hijas de Regreso a Casa.
Preguntamos una vez más cuándo se va a crear un sistema nacional efectivo de protección a defensores de derechos humanos. No queremos más defensores y defensoras atacados y asesinados.
Lucía Melgar y Luciana Ramos Lira