La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) condenaron enérgicamente el atentado por el que resultó herida con arma de fuego el pasado 2 de diciembre la Sra. Norma Andrade, co-presidenta de la organización “Nuestras Hijas de Regreso a Casa” en esta ciudad.
Ambos organismos, repudiaron también el asesinato del activista Nepomuceno Moreno Núñez, integrante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, ocurrido el pasado 28 de noviembre en Hermosillo, Sonora.
En un comunicado de prensa, la Oficina del Alto Comisionado señaló que tanto Nepomuceno como Norma se habían destacado por haber transformado el dolor por la desaparición y asesinato de su hijo e hija respectivamente, en causa de vida en favor de la justica y la promoción de los derechos humanos.
A partir de la desaparición de su hijo, Jorge Mario Moreno León, ocurrida en julio de 2010, Nepomuceno demandó el esclarecimiento de su paradero y el castigo a los responsables.
Muy recientemente, el 14 de octubre, durante el Segundo Encuentro entre el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad y el Presidente de la República, el Nepomuceno expuso el riesgo que enfrentaba y entregó la documentación relacionada con la desaparición de su hijo.
Por su parte, Norma Andrade, desde el asesinato de su hija, Lilia Alejandra García Andrade, ocurrido en febrero de 2001, inició su labor como defensora de derechos humanos de las mujeres, en particular, exigiendo justicia para las víctimas de feminicidio en el Estado de Chihuahua.
La organización que copreside, “Nuestras Hijas de Regreso a Casa”, ha recibido múltiples amenazas y actos de hostigamiento, refirió la oficina de la ONU-DH.
Ambos organismos, repudiaron también el asesinato del activista Nepomuceno Moreno Núñez, integrante del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, ocurrido el pasado 28 de noviembre en Hermosillo, Sonora.
En un comunicado de prensa, la Oficina del Alto Comisionado señaló que tanto Nepomuceno como Norma se habían destacado por haber transformado el dolor por la desaparición y asesinato de su hijo e hija respectivamente, en causa de vida en favor de la justica y la promoción de los derechos humanos.
A partir de la desaparición de su hijo, Jorge Mario Moreno León, ocurrida en julio de 2010, Nepomuceno demandó el esclarecimiento de su paradero y el castigo a los responsables.
Muy recientemente, el 14 de octubre, durante el Segundo Encuentro entre el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad y el Presidente de la República, el Nepomuceno expuso el riesgo que enfrentaba y entregó la documentación relacionada con la desaparición de su hijo.
Por su parte, Norma Andrade, desde el asesinato de su hija, Lilia Alejandra García Andrade, ocurrido en febrero de 2001, inició su labor como defensora de derechos humanos de las mujeres, en particular, exigiendo justicia para las víctimas de feminicidio en el Estado de Chihuahua.
La organización que copreside, “Nuestras Hijas de Regreso a Casa”, ha recibido múltiples amenazas y actos de hostigamiento, refirió la oficina de la ONU-DH.